Recompensando a la Ama de Casa…o al Amo de Casa

Derecho Familiar

Recompensando a la Ama de Casa…o al Amo de Casa, Parte I

¿Eres ama de casa? ¿Eres un padre que cuida de los niños y de la casa mientras que tu esposa trabaja?

¿Estuviste en un choque automovilístico? ¿Como resultado no pudiste seguir haciendo todo su trabajo regular como lo de andar de chófer de los niños, estar llevándolos a citas, comprar mandado, sin mencionar lo de siempre estar lavando para que no se amontone la ropa sucia?

Cuando metemos una demanda después de un accidente de carro, es muy común pedir un reeembolso para el tiempo que uno perdió en el trabajo debido a las heridas que sufrió y el tratamiento que tuvo que conseguir. Es justo que la persona que tenía la culpa le dé a Ud. un reembolso para el pago que perdió.

Casi siempre, mientras se pueda poner pruebas del pago que uno perdió, a aquella persona le darán un reembolso. Lo que las cortes y los ajustadores de seguro de auto buscan ver cuando deciden si la prueba basta o no, es que la prueba tenga certeza, que sea segura. Basado en la certeza de la prueba deciden que si le van a recompensar el pago perdido del trabajo, o no.

Relativamente hablando, es fácil encontrar buenas pruebas, o buena evidencia, cuando la persona que fue lastimado trabaja fuera de la casa, o también si trabaja en casa pero para un negocio establecido. Mientras el trabajo que tiene sea otro que el de ama de casa, o el de criar hijos, es fácil conseguir una carta del jefe, o calcular el promedio de pago que perdió basado en sus ganancias en los últimos 6 meses, por ejemplo.

Pero, honestamente hablando, es el trabajo de la casa, y el trabajo de ser padre o madre lo que le provee ropa, le alimenta y le cria a la próxima generación de los Estados Unidos. Pero, por alguna razón, las mujeres—o los señores—quienes hacen este trabajo no han podido exigir que se les de un reembolso después de estar en un accidente.

Después de que uno tiene un accidente y se encuentre descapacitado por un tiempo, una de dos cosas va a pasar. O la familia tiene que pagar para que alguien mas haga lo que normalmente hacía la madre lesionada, o, lo mas probable, la persona que no estuvo en el accidente de repente tiene muchísimo mas trabajo que hacer.

De cualquier forma, la familia experimenta algún tipo de pérdida o de dificultad. Aquella pérdida sí se puede calcular hablando en términos de dólares—no hay quien pueda decir que no se puede decir que les costó cierta cantidad de dinero.

Las buenas noticias son que algunas organizaciones reconocidas en todo el país—y en las cuales la sociedad americana tiene mucha confianza porque publican reportes conteniendo información muy precisa—empezaron a llevar a cabo algunos estudios sobre el valor económico del trabajo que hacen las amas (y amos) de casa.

Para saber mas sobre las «buenas noticias,» favor de leer Recompensando la Ama de Casa…o el Amo de Casa, Parte II